El edadismo acaba con la 'solución' de Larry Fink a la crisis de las jubilaciones. Getty Images; LinkedIn; Chelsea Jia Feng/BusinessInsider
La jubilación es un problema que afecta a todos los países con una pirámide poblacional invertida, es decir, con más personas mayores que jóvenes.
Desde Wall Street, se plantea que la gente trabaje más años y ahorre más para su jubilación, pero no tiene en cuenta un gran problema: las empresas no quieren contratar a los mayores.
En estos momentos, muchos países del mundo se enfrentan al mismo dilema: los boomers envejecen. En los próximos años, la población en edad de jubilación alcanzará su mayor tamaño hasta la fecha, complicando el pago de pensiones, saturando las residencias de ancianos y aumentando la escasez de mano de obra.
Larry Fink, de 71 años y CEO de BlackRock, una de las mayores gestoras del mundo, ofreció una solución a la inminente crisis en su carta anual de marzo a los accionistas. Para evitar una catástrofe económica, la gente debe ahorrar más dinero y trabajar más tiempo. "¿Qué pasaría si el gobierno y el sector privado trataran a las personas de más de 60 años como trabajadores con mucho que ofrecer, en lugar de como personas que deben jubilarse?", escribió Fink.
La actual edad de jubilación de la Seguridad Social es de 67 años en España como en otros países como Estados Unidos. No obstante, muchos abandonan el mercado laboral antes de cumplirlos, especialmente si han cotizado lo suficiente para cobrar una pensión que les permita vivir, o si tienen suficientes ahorros. La solución de Larry Fink pasa por trabajar durante más tiempo.
En cierto modo, esta alternativa suena bastante sensata: muchas personas de 70 años, sanas, enérgicas y a las que les gusta su trabajo, querrían seguir en el mercado laboral, así que ¿por qué no animar a más gente a hacer lo mismo?
No obstante, este plan aparentemente tan positivo, pasa por alto varios factores clave. Por un lado, está la conciliación, ya que muchas personas mayores no pueden trabajar debido a una discapacidad o porque necesitan cuidar de otra persona. Por otro, está el hecho de que muchos de los que sí pueden trabajar, ya no son bienvenidos en el mercado laboral. A pesar de que la ley prohíbe discriminar por la edad o cualquier otra razón, es una práctica que sigue a la orden del día.
Con la propuesta de Fink, en lugar de facilitar el ahorro y alargar la edad de jubilación, se llega a un callejón sin salida: la economía necesita que los mayores trabajen más tiempo, pero muchas empresas no quieren contratarlos.
Daniel Ross, un abogado de Austin, Texas, que representa a personas que han sufrido edadismo (discriminación por si edad), tiene un gran volumen de trabajo, lo que no es precisamente una buena señal. Ha observado un aumento de casos de este tipo de discriminación en los últimos cinco años, especialmente por despido improcedente. "Aquí en Austin tenemos muchos empleos y empresas tecnológicas que buscan darle un aire más joven a sus equipos", explica.
En 2023, una encuesta de la Society for Human Resources Management revelaba que el 30% de los trabajadores se habían sentido discriminados por su edad en algún momento de su carrera.
"Esto no es nada bueno cuando nos encontramos en un momento en el que todavía tenemos muchos más puestos de trabajo que cubrir y personas capacitadas para cubrirlos", afirma Emily Dickens, responsable de asuntos gubernamentales de la SHRM, sobre los resultados de la encuesta.
'Tenemos un grupo de personas que, al parecer, solo contratan a su propio grupo de edad, porque parecen tener prejuicios tanto con los que son más jóvenes que ellos como más mayores'
Stacie Haller, asesora jefe de carreras profesionales de ResumeBuilder.com
Fuente: Business Insider España, Ann C. Logue| Traducido por: Cristina Gálvez
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